OXFAM: La pandemia duplicó riqueza de los más pudientes mientras el 99% de la población tuvo menos ingresos

OXFAM: La pandemia duplicó riqueza de los más pudientes mientras el 99% de la población tuvo menos ingresos

La riqueza de los diez hombres más ricos se ha duplicado, mientras que se estima que los ingresos del 99 % de la humanidad se han deteriorado, según un informe presentado por Oxfam con motivo de la “Agenda Davos” del Foro Económico Mundial. 
“Si estos diez hombres perdieran el 99,9 % de su riqueza mañana, seguirían siendo más ricos que el 99 % de las personas del planeta”, dijo Gabriela Bucher, directora ejecutiva de Oxfam Internacional durante la presentación del informe. 


Desde el inicio de la pandemia desatada por COVID-19, las personas que tienen fortunas superiores a los $1.000 millones,  han aumentado sus fortunas en 5 billones de dólares, lo que significaría un aumento superior al registrado en los últimos 14 años. 
“Cuando los gobiernos implementaron los paquetes de rescate e inyectaron billones (de dólares) a la economía y los mercados financieros con el fin de apoyar a la economía para todos, lo que ocurrió es que gran parte de ese dinero fue a parar a los bolsillos de los multimillonarios”.

Por ello, OXFAM planteó a los gobiernos del mundo imponer un impuesto excepcional a las personas más acaudaladas de sus países. Esta contribución del 99% a las 10 personas más ricas del mundo podría generar hasta $800.000 millones que serían utilizados para financiar la totalidad de las vacunas que el mundo necesita para super la pandemia, otorgar servicios de salud y protección universal, financiar medidas de adaptación climática y reducir la violencia de género. 

La pandemia aumenta la desigualdad entre géneros: en 2021 sólo el 43% de las mujeres tendrá trabajo

La pandemia aumenta la desigualdad entre géneros: en 2021 sólo el 43% de las mujeres tendrá trabajo

La desigualdad entre los géneros en el mundo del trabajo se agudizó con la pandemia de COVID-19, golpeando desproporcionadamente la ocupación y los ingresos de las mujeres, y no cambiará en el futuro cercano, afirmó este lunes la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Según las nuevas proyecciones globales de esa agencia de la ONU, en 2021 sólo el 43,2% de las mujeres en edad de trabajar tendrá un empleo, en tanto que el 68,6% de los hombres estará trabajando, un nivel que recupera el índice de ocupación masculina previo a la emergencia sanitaria.

La OIT explicó que, si bien el empleo femenino crecerá más rápidamente que el de los hombres el año entrante, no alcanzará a compensar la pérdida sufrida por la pandemia y el nivel de ocupación no llegará a la marca de 2019.

Los datos del nuevo análisis del organismo especializado señalan que entre 2019 y 2020, el empleo de las mujeres decreció un 4,2%, es decir, perdió 54 millones de puestos de trabajo, mientras que el de los hombres se redujo en un 3%, o 60 millones de trabajos.

La publicación “Avanzar en la reconstrucción con más equidad” explica que la desproporción en la pérdida de empleos e ingresos de las mujeres se debió a su presencia excesiva en los sectores económicos más afectados, como los servicios hostelero y manufacturero.

Las mujeres de América Latina fueron las más afectadas

La OIT destaca que, en la afectación por regiones, América registró la mayor pérdida de empleos de mujeres a causa de la pandemia, con 9,4% de trabajos perdidos, frente a un descenso de 7% en el caso de los hombres.

“La caída del empleo de las mujeres perturbó el progreso observado en los últimos quince años gracias a la mejora de las oportunidades educativas para las mujeres, al aumento de disponibilidad de empleos formales en el sector de los servicios, a la migración de zonas rurales a urbanas y al descenso de las tasas de fertilidad”, apunta el análisis.

Asimismo, estima que sólo el 46,8% de las mujeres tendrá un trabajo en 2021. Entre los hombres, el índice alcanzará el 66,2%.

Al retroceso en el continente americano le siguieron los Estados Árabes con 4,1%, y Asia y el Pacífico con 3,8% para las mujeres, frente a 1,8% y 2,9% para los hombres, respectivamente.

En Europa y Asia Central la pandemia redujo el empleo femenino en 2,5% y 1,9%, respectivamente; mientras que en África disminuyó también 1,9%, frente a apenas 0,1% en el caso de los hombres.

Baja calidad del empleo

De acuerdo con la agencia de la ONU, las grandes brechas de género en la calidad del empleo son evidentes: la mayoría de las mujeres que trabajan tienen que aceptar salarios bajos, jornadas de trabajo prolongadas, escasas oportunidades de ascender, exposición a riesgos de salud y seguridad en el trabajo, vulnerabilidad a la violencia y acoso.

Además, gran parte del empleo femenino ocurre en sectores en la economía informal.

El estudio recuerda que las mujeres siguen ganando un 20% menos que los hombres y ven sus salarios más penalizados cuando pertenecen a minorías étnicas, son migrantes o tienen alguna discapacidad.

“La pandemia de COVID-19 ha golpeado a quienes están en el fondo de la escala salarial más que a quienes están en lo alto, y en particular a las mujeres, que están desproporcionadamente representadas en los trabajos de baja remuneración”, subraya la agencia.

Fuente: Naciones Unidas