En tiempo récord, en un proceso judicial plagado de irregularidades, con una alta carga de manipulación política y mediática, un Tribunal de Casación de la Corte Nacional de Justicia de Ecuador ratificó la sentencia en contra del expresidente Rafael Correa y otras 19 personas, entre exfuncionarios y empresarios privados.
El fallo judicial no tuvo unanimidad, pues el conjuez Milton Álava se apartó de la decisión mayoritaria de los otros dos integrantes del Tribunal.
El exmandatario rechazó la resolución, que incluso fue adelantada en la cuenta de Twitter de un canal nacional mucho antes de que sea leída por el juez ponente, Lauro de la Cadena.
“Finalmente lo lograron. En tiempo récord sacan sentencia “definitiva” para inhabilitarme como candidato No entienden que lo único que hacen es aumentar el apoyo popular Yo estaré bien. Denle toda la solidaridad a perseguidos allá Recuerden: a lo único que nos condenan es a vencer”, escribió Rafael Correa en su cuenta de Twitter.
Adjuntó una frase del filósofo francés Voltaire: “El último grado de perversidad es hacer servir las leyes para la injusticia”.
Otros líderes mundiales también expresaron su rechazo. “El lawfare en acción una vez más”, manifestó el líder izquierdista y excandidato a la presidencia de Francia, Jean-Luc Mélenchon.
“#Lawfare”, tuiteó en su cuenta oficial el Premio Nobel de la Paz, el argentino Adolfo Pérez Esquivel.
“Las injusticias no se festejan, ni antes ni ahora. Si se cometieron delitos deben ser juzgados apegados al debido proceso. Cuidado los que hoy festejan mañana se quejen de lo mismo. El poder es efímero”, dijo el jurista ecuatoriano Miguel Racines.
“Lawfare en Ecuador y Bolivia avanza implacable. Correa y Evo por fuera de la contienda electoral”, exclamó la periodista Patricia Villegas, presidenta de la cadena TeleSur.
En línea similar se expresó el periodista uruguayo Carlos Montero: “Lawfare al palo, como dicen por ahí. Primero con Correa y ahora, justicia #Bolivia inhabilita la candidatura a senador de Evo Morales por el departamento de Cochabamba”.